En la entrada anterior aventuré a afirmar que el Nuevo Orden Mundial se podía definir o tener como característica que el Poder Ejecutivo se erigía por encima de los demás poderes del Estado y que esta cualidad se manifestaba en el comportamiento de la OEA de clara tendencia socialista así como la ONU.
Es notorio que las tendencias políticas de quienes presiden los diferentes Estados americanos y por ende, sus representantes en estos organismos internacionales, tienden hacia lo que unos llaman socialismo y otros, social democracia. El elemento común es que conciben al Estado como un ente que gobierna, que dirije, que determina lo que conviene o no a los habitantes de su jurisdicción y ésta jurisdicción es todo, desde estudios hasta deseos o sentimientos. Este Nuevo Orden se expresa defensor del ser humano, de ser humanista, per en la practica trata de llevar al hombre a la condición de robot, de un militante que responde rápida y ciegamente a las órdenes del líder y éste, supuestamente es el único que detemina qué es lo que la ideología dice y quiere, el líder es el único que sabe el qué, el cómo, el cuándo, el dónde, en fin, es como un dios en la tierra, hecho carne y hueso, al cual se le debe tratar con reverencia y admiración, con sumisión y ciega obediencia.
El Nuevo Orden Mundial y la Organización de Presidentes Americanos es apenas una pequeña demostración de lo que ya han descrito otros en diferentes épocas y de diferentes maneras. Se me viene a la mente el Mundo Feliz de Aldous Huxley, por ejemplo, ese Estado frío, esquematizado, donde el ser humano es un número, un operador, un usuario a su servicio. Me parece prudente que volvamos a releer el significado del cargo de Presidente y en especial la función, atribuciones y sentido del mismo en el Sistema Político Republicano y cual en la Democracia y por supuesto cual es su sentido, función y atributos, en las autocracias o mejor, el socialismo del siglo XXI como lo quieren llamar ahora.
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La realidad de un Nuevo Orden Mundial se ve desgraciadamente inclinado a una izquierda salvaje donde el futuro de los paises que se unan sera el de terror, domininados por quienes obstentan el poder y la hambruna de todos sus aliados, el ser humano esta cambiando para su propio mal, si esto continua adelantarenos la destruccion de la humanidad.
ResponderEliminarHola Antonio, no se si la destrucción de la humanidad llegue o se este adelantando, parto más la premisa que lo bueno siempre vence a lo malo, lo que produce bienestar al ser humano vence a lo que le produce malestar, progreso y evolución vence al atraso y a la involución aunque la llamen revolución. Este llamado socialismo del siglo XXI es una total involución en casi todos los aspectos, es oscurantista, supersticioso, fanático, se sustenta sobre la ignorancia del pueblo y se mantiene sobre sus necesidades.
ResponderEliminarEse Nuevo Orden Mundial viene cargado de tabúes y prejuicios, de rencores y odios, su discurso es de paz y amor, pero su accionar es todo lo contrario.
Debemos retomar los valores y prinicpios republicanos e instruir a la población en estos valores y principios morales, sociales, filosóficos y políticos.